miércoles, 19 de septiembre de 2012

mis manos estás libres.
mientras me duchaba volvi a recordar que, y comprobé al mirar, mis manos ya no tienen ningún anillo
ya no hay jabón que se quede atascado en mi dedo
simplemente se fueron. eran dos
lo extraño es que en el último tiempo ambos accesorios venían causando una sensación extraña. solía mirarlos y pensar por qué motivo los llevaba cada día puestos en mi mano izquierda.cada uno de elllos llevaba consigo un peso bastante "importante" y, simbólicamente, hacían de mi mano una carga a transportar.
en el dedo anular llevaba un pequeño uróboro de metal gris que había confeccionado mi nono con sus propias manos. esta serpiente que se muerde la cola marcó mi camino y me alertó acerca de la insistente vuelta al mismo lugar que no dejaba acontecer el verdadero cambio. la cuestión es que un día se fue, desapareció y sólo quedó el recuerdo de ese momento en que se deslizaba de mi mano atraido por alguna fuerza externa en medio del efecto de las flores cosechadas en invierno. lo extraño por ser un regalo del nono pero agradezco que alguien se lo haya llevado. el aprendizaje esta hecho.
el otro anillo, que llevaba en el dedo pulgar hacía diez años, hacía convivir a la luna y las estrellas. también se fue, de igual manera que todo mi antiguo cuarto se pinto de azul, quedando cubiertos recuerdos en las paredes.

son los cambios, reforzados por el recuerdo



No hay comentarios: